Ya es San Valentín.

Luego no nos digáis que no os avisamos.

Lo hicimos a finales de enero y volvemos a recordároslo, sobre todo a los rezagados… que alguno habrá y alguno hay siempre. A los rezagados y a los reincidentes, pues tampoco faltan quienes tiran la casa por la ventana esta semana y colman de flores y plantas a sus parejas.

Keep Calm & Floristería Las Camelias.

Para ellos, y para todos los demás, escribimos esta entrada en Un mundo de flores, el blog de Floristería La Camelias.

Pero, y sin que sirva de precedente, permitidnos acelerar, que no ir al grano, pues somos más bien de los preliminares del amor. Sabemos que muchos de vosotros contaréis los minutos con las yemas de los dedos y, como apuntábamos al principio, alguno sentirá que no le llega la camisa al cuello pensando que no llegará a tiempo para felicitar a su pareja por San Valentín.

Más amor/osos… que nunca.

Empecemos haciendo del amor, elegancia, que es lo que destila nuestra composición de rosas de calidad extra Te quiero. Rematada con un oso amoroso que lleva el amor escrito en su abrazo de peluche. O, si lo de tu pareja son las orquídeas, la composición Orquídea Amor, con una rama de sauce, terciopelo y, también, su osito. Para los que necesiten reponer fuerzas, Amor Eterno, que incluye doce rosas de calidad extra y nuestro osito y una caja de bombones NESTLÉ. Ya sabíais que no hay dos sin tres, pero nosotros acuñamos el nuevo: “no hay tres sin cuatro”, pues nuestra última propuesta con osito es Regadera Amor, una composición equilibrada y que hace juego entre la taza de zinc y las doce rosas, con osito, para los más cálidos en esto del amor.

 

Ahora subimos el tono de intensidad amorosa y os proponemos dos composiciones que intercalan pasión, buen gusto, lujo, frescor y originalidad: Amor en rojo y Luxury Heart, sendas composiciones hechas con mini rosas preservadas de color rojo y rosa respectivamente.

Capazo de amor es nuestra apuesta templada y sosegada para quienes contemplan el amor como la vida, con paciencia, con ternura y con la sonrisa perenne de quien vive cada San Valentín con su pareja de toda la vida, sabiendo que más importante que ser regalados, es tener a quién regalar unas rosas inolvidables.

No nos resistimos a despedir esta entrada deseándoos feliz San Valentín a todos con, sí, sí… nuestro osito, pero esta vez, amén de las rosas de calidad extra, con una tacita para que los enamorados calienten su amor compartiendo un chocholate en una fría tarde de febrero con nuestra alegre Taza Amor.