La Floristería Las Camelias os ayudará con este artículo a perder el miedo a las orquídeas y os daremos algunos consejos para que, al tiempo que las disfrutáis, las cuidéis para prolongar sus vidas si seguís los siguientes pasos que desmitificarán su cuidado y, esperamos, te ayudarán a decidirte por estas flores tropicales repletas de vida.
Sirva como entradilla que hablamos de las orquídeas, una de las flores con más estilo y hermosas que podrás encontrar en estado salvaje y en una floristería. Rezuman gusto, clase y estilo en su propia delicadeza. La flor de la orquídea es tan peculiar como característica. Si además logras guiarla haciendo que caiga en cascada (guiando el desarrollo de su tallo y curvándolo un poquito: ejemplo de Orquídeas Cascada) serán las protagonistas de cualquier estancia en las que las tengas.
Consejo para adquirir una orquídea buena: busca la que tenga las primeras flores abiertas y el resto cerradas para asegurarte una orquídea florida y duradera.
Dicho esto, os explicamos unos pasos muy sencillos para mantener floridas y hermosas vuestras orquídeas y, sobre todo, para que comprendáis que es bien sencillo prolongar su vida si seguís estas pautas:
Guía fácil de la Floristería Las Camelias para cuidar y disfrutar tus orquídeas
Iluminación para las orquídeas
La orquídea tiene que estar en un lugar muy iluminado pero sin que la luz le dé directamente.
¿Qué tierra uso para mis orquídeas?
Sustrato ligero para que el agua no se encharque. Es un sustrato específico para orquídeas, para reproducir su hábitat salvaje, en donde crecen aferrándose a los troncos. Por eso, el sustrato específico para orquídeas suele estar hecho a base de corteza de árbol.
Las orquídeas son versátiles a la hora de cuidarlas e integrarlas como un elemento de decoración más dentro de tu hogar (u oficina, incluso se ven, cada vez más a menudo, en recepciones de hotel), como podréis ver en nuestra Orquídeas Efecto si pincháis sobre ella.
El recipiente para las orquídeas
Algunas orquídeas necesitarán un jarrón transparente: sea plástico o cristal, para favorecer la fotosíntesis. Pero no todas. No tenéis que preocuparos porque cada ejemplar en nuestro catálogo de orquídeas va en el tiesto adecuado y vendrá acompañado por los consejos de nuestro especialista. Os proponemos como ejemplo y como sugerencia nuestras Orquídeas Glass.
Cómo regar mis orquídeas
El riego es muy sencillo y crucial. Bien regada tu orquídea podrás disfrutarla durante mucho tiempo, incluso cuando vaya perdiendo flores, aparecerán nuevas. Riega tu orquídea una vez cada quince días, sin ahogar el sustrato.
Cuando reguéis las orquídeas os recomendamos ponerlas sobre un recipiente que englobe el tiesto, un plato ancho y hondo o un jarrón de cristal un poco más ancho que el tiesto. ¿Por qué? Muy sencillo. Ya os hemos dicho que el sustrato imita la corteza de un árbol (de hecho está elaborado con ella) y, a diferencia de la tierra, que absorbe el agua, la corteza la repele como primera reacción. El agua irá fluyendo y al final, buena parte de la usada para regar a la orquídea se depositará en ese recipiente que os aconsejábamos. Las raíces serán las que absorban lentamente la cantidad exacta de agua necesaria para sobrevivir. Si el agua rezumara (es decir, rebosara y se saliera significará que hemos puesto demasiada agua al regar) tomamos nota para dentro de un par de semanas, que volveremos a regarla, para tener calculada la cantidad exacta que necesita nuestra orquídea. Si además tu salón, o la estancia en la que tienes las orquídeas, fuera seco, no dudes en pulverizar parte de esa agua sobre las hojas para incrementar la sensación de humedad.
Abono para orquídeas
Una vez al mes deberías añadir (cada dos riegos) un poquito de abono específico para orquídeas. Este abono es más ligero que el abono corriente y fertilizará tus orquídeas
Tienes más ejemplos en nuestro Catálogo de Orquídeas en Las Camelias.
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