“La simplicidad es la máxima sofisticación”

Leonardo Da Vinci

La orquídea es todo un clásico.

Conocemos como orquídea a la flor de una planta orquidácea de origen tropical. No importa el rincón donde se coloque una orquídea porque la propia orquídea hará que se llene de elegancia y finura y atraerá las miradas sobre ella acaparando todo el protagonismo, pero sin destacar. Esa es su magia.

Empezábamos éste post citando a Leonardo Da Vinci, quien apuntaba la dificultad de hacer sencillas las cosas. Y la orquídea responde a ese patrón. Vista en profundidad se trata de unas flores, un tallo largo y unas hojas… sin más. Sin menos.

Precisamente su belleza radica en su sencillez, que no simplicidad, Como vemos en nuestra orquídea Ondolaika. Si la estudiamos con detenimiento veremos cuán intrincada es su flor y todos los recovecos que la componen y, sin embargo, salvo observada en profundidad, su línea grácil y fina arroja un conjunto de líneas, texturas y olores que serían capaces de retar al mejor diseñador, al mejor artista. Para muestra un botón con nuestra sombrerera Elegance.

Orquídea Ondolaika

Todo eso implica una orquídea. Y mucho más. Si nos remontamos a los clásicos hablaríamos de la orquídea como un símbolo de virilidad y la fuerza física. La orquídea ha ido mutando en su simbolismo pero siempre ha salvaguardado un valor estético asociado al buen gusto y al lujo. Y por supuesto al amor, pero el amor en su aspecto más físico y sensual.

Sombrerera orquídea elegance

Si os ha gustado éste post explicando las orquídeas y los múltiples significados que las hemos atribuido en distintos períodos de tiempo y en diferentes civilizaciones, volveremos con ellas en otro post para explicaros sus múltiples significados, como hicimos con el significado de los colores de las rosas. Significados y colores, porque las orquídeas pueden rizar el rizo cuando son de color. Y si no mirad la orquídea Cracovia… ¿Qué os parece su color? Es como si la hubiéramos sacado de un lienzo.

Orquídea Cracovia

Bucear en la historia de las flores, o de las plantas, nos hace descubrir cosas que ni imaginamos. ¿Sabíais que la orquídea, amén de ser una de las flores más delicadas y uno de los regalos más preciados… también tienen uso alimenticio? Incluso medicinal.

Al fin y al cabo, ahí donde la veis es una planta que proviene de la vainilla. Si os fijáis en nuestra orquídea Tatami podréis casi apreciarlo. De ahí que los antiguos mexicanos usaran sus pétalos para mezclarlos con cacao y elaborar lo que hoy en día podríamos llamar un chocolate con vainilla… si a esto le sumamos que algunas culturas atribuyen poderes afrodisíacos al consumo de ésta flor… Como podréis observar, el mundo de la orquídea bien merecía éste post.

Orquídea Tatami